Después de unas breves vacaciones regresa la actividad habitual a este blog, en esta ocasión decidí volver con una entrada especial.
La
biblioteca de Mictlán es un proyecto en el que busco transmitir algunas ideas y
abordarlas mediante algunas obras que me parecen llamativas o simplemente
emitir mi opinión en algunos aspectos.
Claramente
todo esto no sale de la nada, ni de mi mera opinión o gusto. Actualmente hay
una gran variedad de contenido audiovisual y escrito, y, además de ser un
creador, soy un gran consumidor de varios proyectos -cosa que en varias
entradas se los he hecho ver-, muchos de estos proyectos me han influenciado en
crear lo que están leyendo.
Uno de estos contenidos es Café Kyoto, un canal de YouTube que se especializa en hablar sobre ciencias sociales -proyecto que recomiendo ampliamente- y que en el mes de junio realizó la segunda edición de un especial llamado “3 libros que me cambiaron la vida”.
El
video es, como el propio título lo dice, uno donde recomienda 3 libros que
marcaron de alguna forma a Juan Felipe, autor de Café Kyoto.
Al
terminar de verlo me di cuenta que se me hizo muy interesante, algunas de sus
recomendaciones ya las había leído, y me puse a pensar si pudiera hacer algo
parecido en este espacio. Después de un tiempo de reflexión decidí hacerlo, pero
a diferencia de Juan Felipe, quiero recomendar no solo medios de literatura,
sino muchas más cosas, como series, anime, comics y manga -los cuales, por
cierto, también son literatura-, películas y videojuegos.
Yo
soy una persona muy geek y muy ñoña, durante gran parte de mi vida he consumido
gran variedad de contenido de muchos aspectos diferentes, así que quiero
compartir un poco de todo esto con ustedes.
De
esta forma les traigo aquí 5 obras que me han marcado, 5 obras que cambiaron o
modificaron de alguna forma mi pensamiento o que me influyeron en ser la
persona que soy ahora, con esta breve introducción comencemos con estas
recomendaciones.
A
Knight’s Tale
Esta
película es una adaptación parcial de “El cuento del caballero” de Geoffrey
Chaucer, esto porque toma algunos elementos de este cuento y experimenta con
todo lo demás.
La
película se centra en un escudero inglés, William Thatcher, quien decide
hacerse pasar por el caballero al que sirve después que este muriera, pero
después de ganar decide seguir con la farsa, hacerse un nombre nuevo para pasar
por un caballero y seguir con este estilo de vida.
Curiosamente
este film también puede ser considerado como ficción histórica, ya que utiliza
muchos elementos históricos documentados, como, por ejemplo, se hace mención a
un papa francés, el cual puede ser Urbano V o Gregorio XI.
Pero
también se da libertades de jugar con otros, como lo es Ulrich Von
Liechtenstein, nombre que usa William en su falsa vida como caballero, este
personaje si existió en la realidad y tuvo la fama de invicto en las justas,
algo muy acorde al personaje de la película.
Pero
el tema más importante que le veo a la película es el cumplimiento de un sueño,
William de niño vio como una justa tomaba lugar el su pueblo, al ver llegar a
los caballeros nació el sueño de volverse uno de ellos, un sueño simple de
cualquier niño, tanto en la edad media como en nuestra época, William quería
conseguirlo a toda costa.
Sin
embargo, William tenía un problema, no era un noble, no era más que el hijo de
un simple techador. Para ser caballero era necesario haber nacido en cuna
noble, y nuestro protagonista estaba muy lejos de esa clase. A William no le
importaba eso y al final demostró ser alguien digno, puesto que el príncipe
Eduardo lo nombra como caballero.
Actualmente
puedo ver muchos de los errores que comete esta película, muchas
inconsistencias y conveniencias, pero aun con todo eso no puedo negar lo
importante que es esta película para mí.
Soy
alguien que ama el medievo en general, no solo el europeo, tanto ficticio como histórico,
se me hace particularmente atrapante y quien incentivó bastante de ese amor fue
esta película, el ver como personas luchan por sus sueños e ideales en un mundo
donde la sociedad es relativamente joven y llena de misterios es algo que amo y
a día de hoy ese amor no ha disminuido ni un poco.
Fate/Stay
Night
Sin
embargo, mi amor por Fate va antes del boom que provocó que tengamos tantas
series y videojuegos de la franquicia, yo conocí esta franquicia en plena
adolescencia cuando Fate solo tenía un anime y es el anime que nadie recomienda,
el que todos pasan por alto, la animación del estudio Deen de 2006.
Hay
muchas opiniones sobre esta animación, pero las que sobresalen siempre es que
es una muy mala adaptación, cosa con la que no concuerdo en su totalidad. Sin
duda no es una buena adaptación, pero tampoco es la segunda temporada de The
Promised of Neverland para que la pongan en ese podio.
Muchos
consideran solo Fate a todo lo que ha sido hecho por Ufotable. Esos proyectos
me encantan, pero siento que abogan mucho por lo épico, espectacularidad y lo
llamativo, sin duda saben cómo hacerlo, queda muy bien, pero Fate es mucho más
que solo batallas épicas.
Fate
aborda muchos temas, desde lo cuestiones mitológicas hasta cuestiones más
personales como los sueños e ideales, y la animación de Deen aborda mucho esto,
ya que esta animación aborda el arco “Fate” que se centra en la relación de
Saber y Shirou, el cual es un arco más sentimental que bélico.
Algo
que me hizo enamorarme de esta saga fue el apartado de la mitología, siempre he
tenido un gran interés por las leyendas y los mitos del mundo, y este anime se
centra mucho en todo esto, ya solo con la chica protagonista tenemos una figura
mítica legendaria, el rey Arturo, solo que de sexo opuesto.
De hecho,
este arco aborda bastante la leyenda del rey Arturo, desde las bases, todo el
recorrido y como curiosidad, el origen lingüístico de su legendaria espada,
Excalibur, la cual al principio fue nombrada como Caliburn y nombres parecidos.
Todos
estos elementos me hicieron crear un gusto especial por el origen de las
leyendas, como fueron cambiadas e incluso de donde provienen los nombres de
muchas cosas, de hecho, por este mismo anime es que tengo mi nombre en
Internet, “Calubur” una variación de la palabra “Caliburn”.
Yo
soy el enviado
Justo
de esto va esta recomendación, “Yo soy el enviado” de Julio Travieso Serrano,
es un libro muy peculiar y que cambio mi pensamiento cuando lo leí a mis 16
años, si pudiera resumirlo de alguna forma simple, es que la maldad quizás no
es tan mala.
De
forma más extensa, este libro cuenta varias historias a lo largo de poco de
2,000 años. Inicia todo con un hombre que viajó por varias naciones del viejo
mundo buscando la verdad, el Dios autentico, alguno que le revelara que
existía.
Hasta que un día se le apareció el mismo Ahriman, Dios de la oscuridad de la antigua religión persa, dándole la respuesta que tanto buscaba, todo el dolor y sufrimiento en esta vida, en otra vida será disminuido, todo posee sentido, pero no acaba ahí, este hombre será elegido como el enviado de este Dios y hará su voluntad hasta que su inmortalidad acabe.
Pero
no es solo la historia del enviado de Ahriman, también conoceremos la historia
de un grupo Gnósticos, un grupo especial que vienen desde los apóstoles de Jesús,
viajaremos hasta la época moderna, donde veremos la historia de un vagabundo,
un hombre maduro ruso y un periodista cubano que investiga algunos asesinatos
sucedidos en las colonias más exclusivas de la Ciudad de México.
Al
final todo esto termina juntándose, la historia sigue una narrativa llena de
misteriosos y ese estado de malicia es muy presente, pero es algo que comencé a
pensar desde aquí, la maldad no es tan mala a la vez que la bondad no es tan
buena, la maldad tiene un propósito, descubrirlo es algo que cada quien debe
hacer y está en su plena libertad de hacerlo.
Después
de todo, el mundo y el universo debe estar en equilibrio constante, preferir
solo algo y tratar de eliminar lo otro solo traerá más caos que orden.
Final
Fantasy VII: Crisis Core
La
franquicia Final Fantasy es muy larga y extensa, tanto que cualquier persona
puede tener su título favorito y puede ser de la saga principal o algún spin
off, ya que abordan muchos temas y muchas narrativas, pero todos concuerdan que
uno de los mejores es Final Fantasy VII.
Después
de todo es uno de los más populares y fue este el que permitió a muchos conocer
el género de los JRPG y la saga Final Fantasy, yo no fui ajeno a esto, no fue
mi primer JRPG, pero si me enganchó bastante. Sin embargo, a medida que crecía
este título no me llamaba tanto, sin duda era bueno, pero no se centraba en mis
favoritos.
Todo
esto cambió cuando pude probar su precuela, Final Fantasy VII: Crisis Core,
durante el juego original escuchamos de un tipo llamado Zack Flair, miembro de
Soldado y amigo de Cloud y quien lo salvó después que el ejército de Shinra los
cazara, poca información más tenemos de él.
Crisis
Core ayudó a expandir todo esto, incluso le da un gran Lore a la espada gigante
que porta Cloud. Este juego es la historia de Zack, desde los momentos finales
de la guerra con Wutai, el descubrimiento de personajes como Angeal y Genesis
hasta el descenso a la locura de Sephiroth.
Pero
para mí hay más que esto, está el camino del honor, un elemento que siempre me
ha llamado la atención, el honor o el vivir de forma honorable, es algo muy
representativo de la cultura asiática, principalmente la japones y la china, ya
que es un elemento muy central en sus historias.
Pero
si pudiera explicarlo de alguna forma, seria creer en algo y seguir ese camino
de la forma más recta y que le permita vivir de una forma digna consigo mismo y
con los demás.
Justo
esto es lo que es el camino de Zack, el durante todo el juego, ve como su
maestro duda de lo que es, de lo que ha vivido, pero el trata de ayudarlo, de
hacerle ver que todo está bien, puede que el camino que eligió no sea el mejor,
pero es el que ha decidido caminar y quiere seguirlo hasta el final.
Ya
que, justo como le dijo Angeal, en ocasiones el honor es una carga demasiado
pesada, pero, aunque así sea es un camino que vale la pena recorrer.
El
discurso clave del personaje es algo que siempre recuerdo y es algo que trato
de hacer siempre con mi forma de vida, casi siguiéndolo como un lema para mí.
“Abraza tus sueños y pase lo que pase, defiende tu honor”
Shijou
Saikyou no Deshi Kenichi
Shijou
Saikyou no Deshi Kenichi, mejor conocido como Kenichi, es un manga de peleas
basado en varios artes marciales de nuestra realidad.
Narra
la historia de Kenichi Shirahama, un estudiante de 16 años, tímido que sufre
bullying por muchas personas, hasta que conoce a Miu Furinji, una nueva chica
del instituto que es muy buena peleando, ella lo introduce en el mundo de artes
marciales donde obtendrá la fuerza para hacer frente a todos los problemas que
tendrá que afrontar debido a sus ideales.
Como
he dicho en este espacio, las artes marciales y cualquier medio que las use me
parece fascinante, generalmente una pelea a golpes es vista como simple
agresividad sin sentido alguno, solo algo que es usado por personas incivilizadas
y violentas.
Creo
que este pensamiento es totalmente erróneo, claro que este tipo de actitudes
pueden ser mera violencia bruta, pero no todo está orientado a esto, el pelear
es agresión, pero también es defensa propia y bajo ciertas circunstancias, una
forma de lenguaje.
Pensar
que las peleas es solo agresión es seguir recreando la narrativa de que somos
seres pensantes y racionales, que nuestro lenguaje puede arreglar todo, el
lenguaje nos permite tener una mejor comunicación, pero hay muchas formas de
comunicación, las peleas pueden ser uno, uno tan válido como el baile.
Pensar
en las peleas como barbarismo es seguir creyendo en el monopolio de la
violencia del cual se ha apropiado el estado y que todos aceptan.
Gran
parte de este pensamiento lo forjé leyendo este manga, esto es algo que se
aborda mucho por esta historia ¿En qué momento las artes marciales se vuelven
violencia? Este manga da una muy buena respuesta, dando a entender que no
existe una respuesta correcta o definitiva, cada quien debe entenderlo a su
forma.
Pero
no solo esto es algo que obtuve leyendo esta historia, sino también el defender
nuestros ideales, nuestras ideas son algo sumamente personal y en este mundo
hay tantas ideas que pueden hacer menos lo que nosotros consideramos como correcto
y lo que no, quizás las nuestras sean las correctas, pero no por eso hay que
hacer que estén por encima de las demás, siempre hay que mantener el dialogo que
permita el intercambio de ideas.
Pero
también hay que recordar que habrá personas incapaces de entender, además de
ser conscientes y estar abiertos ante el hecho de que podemos cambiar de ideas,
no porque sustentemos bien lo que creemos es lo correcto, va a ser una idea
inamovible, nada está tallado en piedra, siempre hay posibilidad de cambio.
Aunque hay un elemento más que ha sido uno de los importantes que me han marcado, el poder del esfuerzo, Kenichi es alguien que no posee ni la más mínima pisca de talento para las artes marciales, así que debe esforzarse mucho a diario para seguir mejorando, pero esto no se rebaja al lema “el esfuerzo supera al talento natural”.
Se
deja en claro que el talento natural puede permitir que una persona mejore
mucho y más rápido que una que no lo tiene, pero las personas sin talento deben
tener una mayor dedicación para igualar la balanza, no porque no tengas talento
significa que no puedes ser bueno.
Todos
estos elementos hacen que esta sea una obra que me ha marcado mucho y que cambió
bastante mi vida, como Kenichi soy alguien que se podría considerar como una
persona sin talento, en mi caso sería la escritura, pero este es el camino que
he decidido seguir y me esfuerzo a diario para seguir mejorando, para que algún
día pueda ser un gran escritor.
Con
esto podemos empezar a cerrar esta entrada, una bastante emocional y personal
que quise hacer desde que vi ese video de Café Kyoto. He de decir que me ha
gustado el resultado, espero les gusten las recomendaciones que les he dado, si
ya han tenido un acercamiento a alguna de ellas les invito a dejar sus
opiniones al respecto, igualmente si se animan a probar alguna de estas obras
me encantaría saber lo que terminen pensando de ella.
Creo que no está de más decir que esta entrada no será la única de este estilo, posiblemente el siguiente año haga otra edición con otras 5 obras que me marcaron, porque hay muchas más cosas que han tenido importancia en mi vida, pero eso lo veremos en el futuro próximo. Sin más que decir me despido por el momento, nos vemos en la siguiente entrada.