En
la actualidad la ansiedad es uno de los males mas comunes y normales que se
pueden tener, al punto que, entre conversaciones cotidianas con amigos, familia,
compañeros de trabajo o escuela el decir “esta situación me está generando
ansiedad”, es más común de lo que podríamos pensar o de lo que nos gustaría
realmente aceptar.
Como
mencione en la entrada anterior, la ansiedad es un estado en el cual nuestros
sentidos se ponen en alerta para advertirnos de un peligro, aunque también
existe la ansiedad con una tendencia más patológica, y es de lo que hablaré en
esta ocasión.
En
ella -la entrada anterior-, omití el hablar sobre los trastornos de ansiedad,
los cuales trataré aquí, pero ligándolos a diferentes cuestiones que han creado
dichos trastornos en nuestra juventud.
La
juventud actual ha sido tachada de muchas cosas, entre algunas están; el ser
flojos, una nula tolerancia a la frustración, el querer tener una vida llena de
lujos sin mucho esfuerzo, en ser extremadamente frágiles ante las críticas y
ser una generación infantilizada.
A
pesar de que algunas cosas puedan estar en lo correcto, existen otras que
pueden estar mermadas por cuestiones más personales; aunque el criticar a
diestra y siniestra a la nueva generación, es algo demasiado común y que se
realiza casi como costumbre. Es una acción marcada para recalcar las evidentes
carencias de los jóvenes al entrar al mundo real, donde deben que lidiar con
las situaciones actuales, con las que, con gran seguridad no están del todo
preparados para afrontar, generando un estado de estrés constante, que crea un
estado de ansiedad posterior.
Pero
a pesar de lo antes mencionado, la juventud actual presenta estados de estrés y
ansiedad demasiado elevados para su corta edad, estamos hablando de jóvenes
entre 21 y 27 años que tienen el estrés y ansiedad de personas de más de 35
años.
Pero
las razones no se pueden explicar de una forma tan simple, ya que como casi
cualquier fenómeno de comportamiento humano que genere una tendencia es
multifactorial, por lo tanto, intentare dar una explicación tomando en cuenta
ciertos aspectos que podrían generar dichos estados.
Incertidumbre sobre el futuro.
La
incertidumbre sobre el futuro es un tema bastante presente en nuestra vida, y
nace desde muy jóvenes; nace en la etapa de la adolescencia, ya que a lo largo
de esta transición de niño a adulto se presentan constantemente las dudas de ¿qué
nos deparará el futuro? ¿si tendremos una vida sencilla o una vida algo
complicada?
Al
igual a la elección que posiblemente llena de más estrés a los adolescentes, ¿qué
deberán estudiar? Ya que llegando a la preparatoria empieza una presión social
en la que se demanda el saber anticipadamente que se estudiará y con ello que
se hará por el resto de su vida.
El
pedir algo tan grande a tan corta edad, y más en una etapa tan complicada como
lo es la adolescencia, está totalmente fuera de lugar, y dicha presión social
no hace más que empezar, ya que se inicia exigiendo eso y posteriormente se
pedirán diversas cosas, y si la persona es bastante susceptible podría generar
un trastorno de ansiedad, en específico trastorno de ansiedad generalizada.
El
trastorno de ansiedad generalizada se caracteriza por una incontrolable y
excesiva cantidad de pensamientos preocupantes sobre su vida, que van desde el
aspecto social, salud y aspecto laboral. Sin duda el generar este tipo de
trastornos pone un estrés mayor en su vida diaria, ya que además de lidiar con
las situaciones habituales, se tiene que lidiar con las preocupaciones
personales que pueden o no estar justificadas.
Presión social.
La
presión social es un punto en el cual estamos inmiscuidos casi desde un inicio
en nuestras vidas. Esta se caracteriza por ser ideas preconcebidas que la
propia sociedad, en la cual formamos parte, ha creado a lo largo de las décadas
y se espera que sigamos los moldes impuestos.
Es
decir, seguir dichas ideas de lo que una persona debería seguir, como lo puede
ser, tener un buen trabajo, seguir una carrera universitaria la cual nos pueda
generar un empleo bien remunerado, encontrar pareja y que esta sea una persona
buena, posterior casarse y tener hijos, claro hay bastante más cosas que
engloban esta presión social, pero este es el molde más básico y característico
que posee la sociedad.
El
ser propenso a seguir dichos estándares que impone tan crudamente la sociedad,
hace que se generen estados de estrés y ansiedad al no poder cumplir con dichos
estándares y podrían generar diversos trastornos; entre algunos trastornos están
la ansiedad social y el trastorno de ansiedad por separación.
El
trastorno de ansiedad social se caracteriza por una ansiedad irracional; el
miedo y la evitación de situaciones sociales debido a sentimientos de
vergüenza, la timidez y la preocupación que se está viendo negativamente por
otros.
Este
tipo de ansiedad es bastante común y se podría considerar que la podrían tener
los llamados “antisociales”, este término es erróneo; lo más correcto sería
introversión. Aunque también se ha generado una oleada de personas que se
alejan de muchas cuestiones sociales, volviéndose “autistas por convicción”, ya
que se alejan de todo aspecto social y se aíslan por iniciativa propia, algo
parecido a los Hikikomori en Japón, los cuales se aíslan totalmente de
la sociedad por iniciativa propia y empiezan una clase de gusto excesivamente
alto por cierta cosa en específico, aunque esto último puede variar bastante.
El
trastorno de ansiedad por separación se caracteriza por un estado de pánico al
tener la idea de que una relación ya sea a nivel afectivo o amistoso y que sea
de gran significado para la persona pueda terminar abruptamente, aunque puede
estar ligado a la sensación de crítica ante la idea de tener un fracaso en la
relación afectiva.
Economía.
Este
punto es en el que cualquier persona podría llegar a entender con más
facilidad, ya que los otros puntos que he expuesto puede que algunas personas jamás
las hayan experimentado por cuestiones personales, pero el aspecto económico es
tan general que todos pueden entenderlo.
No
se necesita decir que la economía actual no es la mejor en muchos años,
cualquiera que esté en contacto con personas lo sabe. El quejarse de los
salarios pobres y el aumento de todo tipo de alimento u otras cuestiones, son
temas que se tocan a diario, ya sea que lo hablemos con nuestros allegados o
escuchándolo en conversaciones ajenas en el transporte público.
La
economía está bastante mal, y algunas empresas lo saben de antemano y por lo
mismo exigen de sobremanera a sus empleados para que rindan mucho más de lo que
deberían, y estos lo harán para mantener su puesto en la empresa y conservar
ese empleo que tan desesperadamente necesitan. Con esto se crea un ambiente
bastante competitivo y para nada sano para demostrar que se es necesario en la
empresa, no porque sea el trabajo ideal para la persona si no para conservar
ese empleo y seguir sobreviviendo.
Este
ambiente estresante puede desencadenar varios trastornos como los explicados con
anterioridad y se podría generar el trastorno obsesivo compulsivo, mejor
conocido como TOC.
El
TOC es, con gran seguridad, el trastorno de ansiedad más conocido, y se
caracteriza por pensamientos persistentes, imágenes recurrentes, impulsos
(obsesiones), un deseo irresistible de realizar actos o rituales (compulsiones)
irracionales y aparentemente sin sentido.
Generalmente
el TOC es una respuesta ante el ambiente estresante o ante un evento traumático
en la persona, este ayuda a que el estrés y la ansiedad disminuya y no afecte
tanto, aunque él no realizar dicho ritual puede generar una ansiedad mayor.
En
los jóvenes este TOC podría verse reflejado en la imperiosa necesidad de
mantener cerca su celular, ya que los celulares forman parte de su vida y es su
ventana de escape ante diferentes situaciones que los alteran, y el perder
dicha ventana puede que terminen teniendo una crisis de ansiedad al no tener
acceso a ella.
Evidentemente
no abarqué todos los puntos y razones que generan ansiedad en los jóvenes, pero
he puesto los puntos que podrían ser los más importantes y explicando por qué
estas han generado tanta ansiedad en ellos, al punto de crear trastorno de
ansiedad que no deberían de tener, o al menos no a tan pronta edad.
Si
al inicio de su vida laboral están teniendo dichos niveles de estrés y
ansiedad, a la edad de 35 años (que es donde dichos parámetros suben por
diversas cuestiones físicas y personales) tendrán crisis de ansiedad demasiado
altas y a niveles que posiblemente jamás habríamos visto, es importante tener
en consideración esto y como sé que es imposible cambiar el ritmo de vida del
mundo, entonces es importante promover la salud mental, que para estos casos
sería importante y de mucha ayuda, que si bien no eliminarían dichos estados,
el ir con un psicólogo o psiquiatra podría ayudar a bajar bastante esos niveles
a un punto que no afectara su vida diaria.
